Después de tantos años viviendo en sociedad, he llegado a la conclusión que de las cosas más importantes y básicas en esta vida… y en todas las que ustedes quieran vivir… dependen únicamente de la educación (¡Oh, gracias bendita Calíope por tu inspiración). Por ello, he creado este blog.

Pero si de aportar soluciones se trata, no esperen milagros, que todo en esta vida requiere esfuerzo. Este blog me servirá de agenda, recordatorio y reflejo de lo que puede valer la pena trasmitir y comunicar. También, no nos engañemos, poder desparramar a mi aire, que para eso soy el autor.

Quizá se hayan fijado en el título: Piratas y corsarios en la educación. Si les gusta un poquito la historia o son un mínimo de curiosos, ya sabrán la diferencia entre unos y otros. ¿Quiénes son aquellos que, a costa de la educación, se lucran y roban pensando en sus intereses? ¿Quiénes son aquellos que lo hacen incluso dentro del mismo sistema educativo? ¿Quiénes son aquellos que manipulan el sistema en contra de todo sentido común? Algunos se hacen llamar profesores, otros directores, otros políticos y los peores, la misma sociedad (nosotros)... por permitirles todo esto.






miércoles, 2 de enero de 2019

Convivir con mascotas durante la infancia reduce la probabilidad de desarrollar alergias

 
Un equipo de investigadores de la Universidad de Gotemburgo ha descubierto que los bebés viven con mascotas tienen menos alergias y otras enfermedades cuando llegan a adultos.
 
Se cree comúnmente que permitir que los bebés y los niños entren en contacto con los gérmenes ayuda a que su sistema inmunológico se fortalezca, ofreciéndoles más protección en el futuro. Este nuevo estudio trató de obtener más información sobre los posibles beneficios de la exposición a gérmenes para los bebés que viven con mascotas.

Gérmenes en la infancia

Uno de los conjuntos de datos del estudio incluyó información de 1 029 niños que tenían siete u ocho años de edad. En ese conjunto de datos, los investigadores encontraron que la incidencia de alergias (que en este estudio incluía asma, eccema, fiebre del heno y rinoconjuntivitis alérgica) fue del 49 por ciento en niños que no habían estado expuestos a mascotas cuando eran bebés. Ese número se redujo al 43 por ciento para los niños que habían vivido con una sola mascota cuando era un bebé y al 24 por ciento para los niños que habían vivido con tres mascotas.
 
El segundo conjunto de datos contenía información sobre 249 niños: mostró que la tasa de alergia entre los niños que crecían sin una mascota era del 48 por ciento, 35 por ciento para los niños con una mascota y solo el 21 por ciento para los niños que habían crecido con varias mascotas.
 
Los investigadores sugieren que, en conjunto, los dos conjuntos de datos muestran que cuanto más exposición tienen los bebés a las mascotas, es menos probable que desarrollen alergias en el futuro. También señalan que tener mascotas es solo una forma de reducir el riesgo de alergia: hay otros factores, como nacer por vía vaginal, vivir en una granja y tener hermanos.

Poner bebés boca arriba a ponerlos boca abajo

 
En la década de los 60 era normal hablar de la muerte súbita infantil y de que la recomendación de las autoridades sanitarias para evitarla era no acostar a los niños boca arriba debido al reisgo de asfixia provocada por el vómito.
 
Esta idea errónea que aumentó el número de bebés muertos fue promovida por una idea propagada durante la Segunda Guerra Mundial.

Segunda Guerra Mundial

Durante la Segunda Guerra Mundial, médicos y enfermeras descubrieron que los soldados inconscientes evacuados en camilla del campo de batalla sobrevivían más si estaban recostados boca abajo en lugar de boca arriba. Porque así no se ahogaban con su propio vómito. Así surgio la llamada "posición lateral de seguridad".
 
Esta idea se generalizó y empezó a aplicarse también a los bebés, que empezaron a acostarse boca abajo para evitar un posible ahogamiento por vómito. Durante años, se aceptó como una verdad incontrovertible a pesar de las estadísticas, como refiere Hans Rosling en su libro Factfulness:
"A pesar de que los datos indicaban que las muertes súbitas de bebés aumentaban, en lugar de disminuir, no fue hasta 1985 que un grupo de pediatras de Hong Kong sugirió que la posición podía ser la causa. Incluso entonces, los médicos de Europa no prestaron demasiada atención."
Pero ¿cómo es posible que lo que funciobaba con los soldados no lo hiciera con los bebés? Porque los niños dormidos tienen reflejos que funcionan perfectamente: si giran y se ponen de lado si vomitan estando boca arriba. Sin embargo, boca abajo, puede que algunos bebés todavía no tengan suficiente fuerza como para inclinar sus cabezas y mantener despejadas sus vías respiratorias.
 
Con todo, el Síndrome de la Muerte Súbita del Lactante (SMSL), también conocido como Muerte en la Cuna, todavía no se entiende del todo. En la actualidad se calcula que el SMSL afecta a 1 de cada 2.000 bebés, y sucede sobre todo entre la cuarta y la decimosexta semana (entre que el bebé cumple 1 mes y cumple los 4 meses). Naturalmente, tiene muchas causas potenciales, no solo la asfixia por vómito.
 
Sea como fuere, la recomendación es clara: poner al bebé a dormir de lado es cinco o más veces más seguro que ponerlo a dormir boca abajo, y por eso en muchos hospitales lo recomiendan así. Sin embargo, dormir boca arriba es el doble de seguro que dormir de lado (y en consecuencia, diez veces más seguro que dormir boca abajo).